El horno no está para bollos, y en Catamarca, los trabajadores municipales lo saben bien. Esta vez, el Sindicato de Obreros y Empleados Municipales (SOEM) decidió ponerle los puntos a la Legislatura: exigen la derogación urgente del Decreto 142/25, esa joyita firmada por el Ejecutivo que aumenta los descuentos a los afiliados de OSEP… pero sin mejorar absolutamente nada.
¿Qué hace el decreto? Básicamente, le mete la mano en el bolsillo a más de 10.000 trabajadores estatales —incluidos docentes, jubilados y pensionados— para cobrarles más sin que su cobertura médica se vea beneficiada en lo más mínimo. Como si pagar más fuera parte del tratamiento.
“Somos la variable de ajuste”, disparó el secretario general del SOEM, Luis Alejandro Álamo, en la nota formal que mandaron al Senado. Y no es para menos: los afiliados ya vienen soportando coseguros de hasta $250.000 por cirugías, internaciones o estudios, mientras siguen escuchando la misma excusa: “no hay plata”. Salvo, claro, para descontar compulsivamente.
A esto se suma que la famosa Ley Antiplus de 2019 —esa que prohibía el cobro extra por parte de médicos— parece más papel mojado que norma vigente, porque los cobros siguen como si nada.
El gremio presentó un recurso de amparo para frenar el atropello, pero la Corte lo rechazó por “inadmisible”. Al parecer, el daño económico de cobrar más y dar menos no es suficiente prueba. Por las dudas, juntaron más de 2.000 firmas en 5 días y organizaron tres movilizaciones, pero del Gobierno, ni señales.
Por eso, el SOEM ahora pone toda la presión sobre los legisladores y les pide que no se hagan los distraídos. Exigen no solo que deroguen el decreto, sino también que investiguen el manejo de OSEP, porque todo indica que el problema no es lo que falta… sino lo que se esconde.
En resumen: los trabajadores piden algo simple. Que la obra social sea para cuidarlos, no para seguir ajustándolos. Que la salud no se convierta en un privilegio y que el descuento no termine siendo una condena.